viernes, 17 de marzo de 2017

¿Dónde residen la inteligencia y las emociones?


Esta pregunta ha intrigado a los hombres desde tiempos inmemorables. Muchas civilizaciones otorgaron al corazón tales privilegios. Lo que ahora parece una obviedad, que el cerebro está detrás de los procesos mentales, es un conocimiento relativamente nuevo aunque muy asumido. Con el libro Cómo percibimos el mundo, Ignacio Morgado, una de las grandes referencias en el campo de la neuropsicología y catedrático de Psicobiología en el Instituto de Neurociencia de la UAB, nos desvela aspectos de la mente humana y los procesos sensoriales y perceptivos que no tenemos tan asumidos y que, incluso, llegan a sorprendernos.

Ignacio Morgado menciona que, por sorprendente que parezca, la idea de que el cerebro es quien genera los procesos mentales es relativamente nueva. Los antiguos egipcios, considerándolo un órgano superfluo, lo extraían por la nariz de los cadáveres que embalsamaban. En la Grecia clásica, Aristóteles encontró motivos para ubicar los procesos mentales erróneamente en el corazón. Incluso el filósofo racionalista francés René Descartes, entrado ya el siglo XVII, creía que la mente (o alma) era algo ajeno al cuerpo.

Según Jean Piaget. Estudio el desarrollo de la Inteligencia en los niños, a través de estos estudios logro poner en evidencia que la inteligencia y el pensamiento lógico de los niños se construye progresivamente, siguiendo sus propias leyes y  pasando por diferentes etapas, hasta llegar a la edad adulta. Además que (…) no son atributos naturalmente dados, sino que son complejos procesos cognitivos que tienen una base orgánico-biológico pero que  resultan de las relaciones que establece un sujeto qué quiere activamente conocer y el mundo-social-cultural-material que lo rodea y que será conocido.

Cada parte del cerebro está a cargo de diferentes procesos mentales ¿Pero será esto cierto? ¿Cómo es que nuestro cerebro logra funcionar? ¿Cómo algo físico llega a procesar algo emocional o racional? ¿Qué le dará vida? ¿Cómo hubiera sido la vida si nunca hubiéramos desarrollado inteligencia y emociones? ¿Cómo fue que se añadió la capacidad de pensar de forma abstracta y más allá de la inmediatez del momento presente, de comprender las relaciones existentes, y de desarrollar un yo consciente y una compleja vida emocional?


Referencias bibliográficas:
Colomé S. (2012). Ignacio Morgado: "Fuera de nosotros no hay luz, gusto ni tacto". 16 DE marzo de 2017, de LA VANGUARDIA Sitio web: http://www.lavanguardia.com/ciencia/20120426/54285819437/entrevista-ignacio-morgado-psicobiologia.html
Morgado I. (2012). Cómo percibimos el mundo: Una exploración de la mente y los sentidos. ND: Ariel.
ND. (2015). JUN 15 Jean Piaget - concepto de la Inteligencia. 16 de marzo de 2017, de Blog Sitio web: http://tesinatamayosilva.blogspot.mx/2012/06/jean-piaget-concepto-de-la-inteligencia.html



1 comentario:

  1. Su texto me parece muy interesante, como mencionaban ustedes "el valor que se le da al cerebro de los sentimientos" no es muy viejo. Sinceramente es un poco difícil encontrar una respuesta a ¿Cómo es que algo no físico (emociones) llega tener efecto en algo físico?. Sinceramente creo que esto se debe a nuestro forma de crecer y educarnos, ya que, en muchas ocasiones lo que para uno es sensible o provoca un cierto sentimiento para otro le es indiferente. Nuestros principales sentidos son los que nos hancen capar las distintas acciones que nos rodean. ¿Acaso podríamos llegar a tener algún tipo de sentimiento, si nacieramos sordos, mudos, ciegos, y sin poder tocar o probar aquellos elemento de nuestro exterior? ¿Y si es que llegaramos a senti, sabríamos interpretar el significado de trsiteza, alegriía, rabia, entre otras cosas? Me gustó su post :D

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